DROM

Drom parte de la idea de crear una silla versátil, escultórica y funcional.

La idea original surge de la premisa de reutilizar residuos sobrantes en la fabricación de mobiliario.

Es una silla pensada para poder combinar uso interior y exterior, uso formal y uso informal.
Así mismo, Drom puede usarse como silla convencional, como taburete alto o inclusive si nos sentamos a la inversa puede usarse la parte superior de la silla como mesa. Bien sea para apoyar una tablet o para tomar notas en una libreta.

Dispone de una base plana que radica en la necesidad de dejar nuestras pertenencias en la silla sin influir en la comodidad de la misma. Esta base sirve para dejar un bolso, una mochila, un casco, etc.

Una de las posibles configuraciones sería enfrentando las sillas, como si de una reunión informal se tratase. Además, Drom está pensada por si queremos cambiar de postura, podamos
sentarnos en la zona más alta de la misma y apoyar los pies (como si se tratase de un taburete alto) mientras seguimos conversando.

Es en este momento, en el que el concepto de versatilidad cobra mayor sentido. Ya que el diseño de Drom cubre las diferentes situaciones que puedan darse en un espacio (laboral, familiar…)

Drom, debido a la carencia de reposabrazos y su simplicidad de formas, permite ser unida creando un banco. Todo ello, sin la necesidad de la compra específica de un banco de sala de espera, únicamente disponiendo de varias sillas Drom, se podría configurar el espacio en base a las necesidades del mismo.

Drom combina la silla convencional con un taburete alto, obteniendo versatilidad en los espacios donde se ubique. La función de taburete ha definido sus formas, incluyendo unos reposapiés.